Prentsa oharra 2008

Con un sencillo adhesivo, NILSA quiere recordar a todos la conveniencia de reciclar lo que ya no tiene más usos, reutilizar las cosas que pueden tener otra función y reducir el consumo de agua, calefacción, electricidad y combustible. Para tener un planeta menos expoliado, un cosumo menos excesivo y un planetamiento diario más sostenible.

El comité de dirección del Consorcio de Residuos de Navarra, que preside la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva Murguialday, ha finalizado el ejercicio de 2008 con la adhesión de todas las mancomunidades navarras, excepto la de la Comarca de Pamplona, a la que el Consorcio ha reiterado su voluntad de integración en numerosas ocasiones. Tras un año de conversaciones entre esta entidad y el Consorcio, la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona todavía no ha decidido su ingreso, si bien ha mostrado su voluntad para buscar una solución al tratamiento de la basura. El Consorcio, en la sesión celebrada hoy, ha admitido como miembros de pleno derecho a partir del 1 de enero de 2009 a las mancomunidades de Montejurra, Sakana, Alto Araxes, Bidausi y Zona 10, así como a los ayuntamientos de Areso, Larraun, Leitza y Lekunberri. Esto supone que todos los navarros, excepto los de la Comarca, contarán con un mismo sistema de tratamiento de la basura orgánica que tiene lugar en la planta de biometanización de “El Culebrete”, gestionada por la Mancomunidad de Residuos Sólidos de la Ribera. En esta instalación, los residuos que los ciudadanos depositan en el contenedor verde reciben un tratamiento de acuerdo a la normativa europea y ven reducido su volumen. La Unión Europea estableció que en julio de 2009 la cantidad de residuo generado tenía que ser un 50% menor que en 1995. Navarra difícilmente podrá cumplir con este hito si la Mancomunidad de la Comarca, que gestiona aproximadamente el 60% de la basura de toda la Comunidad, no se adhiere al Consorcio o busca una solución propia. En la reunión, el Consorcio también ha aprobado las tasas que tendrán que pagar los beneficiarios de este servicio, que serán de 28,47 anuales para las familias y de 35,79 euros para las industrias. Con ellas, el Consorcio prevé recaudar 4,164 millones de euros, que contribuirán a un presupuesto de 12,71 millones de euros en 2009. Este presupuesto permitirá construir dos plantas de transferencia en las zonas de Tafalla y Sangüesa, respectivamente; un muelle de descarga para la mancomunidad de Ribera Alta, que se ubicará en el centro de residuos de Moratiel, y otro para la mancomunidad de Sakana, que se construirá en el centro de residuos de Arbizu; así como continuar con el servicio de tratamiento de las toneladas de basura en El Culebrete. El departamento de Administración Local del Gobierno de Navarra aportará, por su parte, 7,61 millones de euros. De estos, 3,73 millones y 1,25 millones corresponden a los planes de infraestructuras locales 2005-2008 y 2009-2012, respectivamente, y 2,63 millones a varias subvenciones del propio departamento. Los 930.000 euros restantes hasta completar el presupuesto para 2009 serán financiados con la recaudación de la tasa en ejercicios futuros.

El Consejo de Administración de NILSA, formado por 14 consejeros que representan a las entidades locales y al Gobierno de Navarra de forma paritaria, se ha reunido para aprobar el presupuesto y el plan de actuación de 2009, un ejercicio que estará marcado por la coyuntura global de crisis. El próximo año, la empresa pública que preside la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva Murguialday, gestionará 4,43 millones de euros en obras, frente a los 7,98 de este ejercicio. En 2009, las zonas de Navarra que se beneficiarán de estas inversiones son el valle de Lónguida, con la construcción de la depuradora que sustituirá a la actual de Aoiz; la mancomunidad de Montejurra, con la conexión de Oteiza a la depuradora de Estella; Fontellas, que se conectará a la planta de Tudela; Alsasua, que tendrá un nuevo colector para Zuntaipe y Baikolar; Urdax, que contará con una nueva instalación que atienda Dantxarinea; Larraga, con la ampliación del sistema de colectores; Santesteban, que aumentará la capacidad de su depuradora; Sangüesa y Valtierra-Arguedas. NILSA prevé también destinar 1,08 millones de euros a obras menores y de gestión directa, es decir, realizadas por las entidades locales en función de sus necesidades, pero coordinadas desde NILSA. Además de la inversión en obra civil, NILSA destinará 12,91 millones de euros a la operación y mantenimiento de las depuradoras que ya existen. Son casi un centenar de instalaciones, a las que hay que sumar medio millar de microestaciones, que dan servicio a poblaciones de menos de 500 habitantes. Depurar un metro cúbico de agua les cuesta a los navarros entre 0,16 y 0,70 euros. Las grandes instalaciones, ubicadas principalmente en La Ribera (excepto Arazuri), dan servicio a poblaciones de más de 15.000 habitantes equivalentes y logran que el coste de tratar un metro cúbico de agua residual sea muy rentable: 0,162 euros. A medida que el volumen de agua disminuye, porque la población es menor, se encarece el tratamiento. En las localidades de menos de 250 habitantes, tratar un metro cúbico sale seis veces más caro. NILSA se financia mediante la tasa del canon de saneamiento, que todos los contribuyentes navarros pagan a través del recibo del agua. El Consejo de Administración ha aprobado que las tarifas para 2009 sean de 0,444 euros por metro cúbico para los usuarios domésticos y de 0,555 euros por metro cúbico para las industrias. El montante anual que NILSA prevé recaudar con estas tarifas es de 26,59 millones de euros. Durante 2008, NILSA recaudará aproximadamente 24,77 millones de euros en concepto de canon de saneamiento. No obstante, el canon de saneamiento no basta para financiar todas las actuaciones de NILSA, regidas por el Plan Director de Saneamiento de los Ríos en Navarra, por lo que la empresa pública cuenta también con aportaciones del Departamento de Administración Local a través del Plan Infraestructuras Locales (2005-2008). En 2009, estas aportaciones serán de 1,52 millones de euros. Finalmente cabe destacar NILSA terminará en 2009 su aportación económica al Parque Fluvial de la Comarca de Pamplona, con 277.548 euros, ya que su gestión fue asumida en 2007 por la Mancomunidad de la Comarca.

Casi 26 millones de euros en 2007. Es la financiación que la empresa pública NILSA gestionó en el último ejercicio completo en construcción y mantenimiento de depuradoras para cumplir el Plan Director de Saneamiento de los Ríos. El 23 de diciembre, el Consejo de Administración de NILSA, presidido por la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva Murguialday, será informado de la estrategia y el presupuesto previstos para el próximo año. En este contexto, hay que subrayar que NILSA cuenta en la actualidad con una decena de proyectos constructivos enmarcados en el Plan Navarra 2012, como la depuradora de Valdega, que comenzó a funcionar el pasado octubre, o el proyecto de la nueva depuradora del valle de Lónguida, que se pondrá en marcha en 2009. En la actualidad, Navarra cuenta ya con casi un centenar de instalaciones de depuración ubicadas en todo el territorio foral, que tratan correctamente el agua residual del 97% de los ciudadanos. A éstas hay que sumar medio millar de microestaciones, que dan servicio a poblaciones de menos de 500 habitantes. Tratar las aguas residuales domésticas e industriales supone devolver al río un caudal importante de agua en casi las mismas condiciones que el agua presentaba antes de su utillización. Navarra trata al día 203 millones de litros de agua residual, o lo que es lo mismo, el equivalente a cien piscinas olímpicas. Esto supone un total anual de unos 80,4 hectómetros cúbicos: cuatro veces la capacidad del embalse de Eugui. En 2007 la recaudación del canon de saneamiento, que pagamos todos los navarros a través del recibo del agua y que ha financiado un 51,6% del Plan Director de Saneamiento de los Ríos desde que éste se creara en 1989, ascendió a 21,98 millones de euros. El canon de saneamiento facturado está dedicado íntegramente a construir las infraestructuras básicas de depuración (depuradoras, colectores, tanques de tormenta, pozos de bombeo, fosas sépticas…) y también a mantenerlas. Depurar un metro cúbico de agua cuesta 17 céntimos de euro. Por otra parte, NILSA cerró 2007 con 15,14 millones de euros dedicados a la ejecución de obras y otros 10,54 millones de euros destinados a la gestión de las depuradoras. De las obras realizadas, la mayoría correspondió a un régimen de cooperación entre la empresa pública y la entidad local (12,2 millones), un acuerdo por el que la entidad local delega en NILSA tanto el proyecto como la ejecución de la infraestructura. Ésta es la forma más habitual de trabajo frente a las obras de gestión directa de las entidades locales, en las que son éstas las responsables de sacar adelante todo el proyecto, que únicamente es validado y financiado por NILSA. En 2007, este tipo de obras supuso una inversión de 2,9 millones de euros. La mayoría de las depuradoras son operadas por NILSA, si bien las mancomunidades de la Comarca de Pamplona y de Montejurra se responsabilizan del funcionamiento de las plantas que están en su ámbito de actuación. No obstante, el coste de estas instalaciones también está financiado por el Plan Director de Saneamiento de los Ríos, cuya implantación corresponde a NILSA.

El 24 de octubre un grupo de la Asociación Síndrome de Down de Navarra vendrá a conocer nuestras oficinas de la Avenida Barañáin. Una decena de jóvenes con síndrome Down, acompañados por dos monitoras, visitarán la sede de NILSA a las 10.30 horas, donde serán recibidos por el gerente, Andrés Sola, que impartirá una charla sobre el funcionamiento de la empresa. El objetivo es que estos jóvenes conozcan mejor la entidad con la que van a colaborar el 14 de noviembre en una jornada de reutilización de agua residual que NILSA está organizando con el Centro de Recursos Ambientales de Navarra (CRAN) y en la que participará el director técnico, Juan García, como ponente. Los jóvenes realizarán labores de apoyo durante la celebración de la jornada, como entrega de documentación, control de visitas o gestión de la megafonía. NILSA ha recurrido a la bolsa de empleo de esta asociación como parte de su compromiso de Responsabilidad Social Corporativa y con el objetivo de favorecer la integración real de los discapacitados en el mercado laboral. En este sentido, NILSA ya firmó con la Fundación Aspace un acuerdo de colaboración el pasado mayo por el que se comprometía a incluir en sus procesos de selección de personal a personas con discapacidad. Tras el acuerdo del Gobierno de Navarra por el que se suspenden las contrataciones en las empresas públicas, NILSA ha optado por encargar trabajos de jardinería a las brigadas móviles de Aspace, para algunas de sus depuradoras. En la actualidad, el departamento de Operación y Mantenimiento de la zona Norte está elaborando un listado de instalaciones donde poner en marcha esta experiencia piloto. Está previsto que la firma del contrato con Aspace tenga lugar antes de fin de año y NILSA prevé ampliar el número de depuradoras, si la experiencia funciona. Finalmente, NILSA también ha adaptado su programa educativo a personas con discapacidad. El equipo adjudicatario de la campaña medioambiental, Arbuniés y Lekunberri, ofrece este curso, por primera vez, materiales y charlas específicas para colectivos con algún tipo de discapacidad. En el curso que acaba de comenzar ya cuenta con una petición por parte de Anfas Navarra para ofrecer charlas sobre depuración durante la segunda quincena de noviembre. Así, los días 18, 19, 20, 22, 23 y 29 de noviembre, Arbuniés y Lekunberri ofrecerá a niños y adultos charlas didácticas sobre el correcto uso del agua y el proceso de depuración. NILSA permanece abierta a las sugerencias sobre proyectos socialmente responsables que cualquier ciudadano o miembro del equipo profesional desee transmitir, ya que la entidad tiene como objetivo integrar estrategias de valor social en su funcionamiento habitual.

Tudela es la depuradora más visitada. Tras ocho años concienciando a niños y adolescentes en la necesidad de hacer un uso racional del agua, NILSA decidió dar un nuevo impulso a su campaña de educación medioambiental el año pasado. Ahora presenta los resultados del curso 2007-2008, en el que ha ampliado su programa educativo con visitas guiadas al río, talleres sobre usos eficientes del agua en el aula y charlas en centros educativos. El equipo de Arbuniés y Lekunberri, que resultó hace dos años adjudicatario por concurso público del programa educativo de NILSA, ha presentado los mejores resultados de participación escolar desde que naciera este programa, hace casi una década. Hasta el pasado junio, 2.296 personas, de los que la mayoría eran escolares, disfrutaron de las visitas al río y a las depuradoras, y de los talleres y charlas en las aulas. Repartidos en 223 grupos, estos dos millares de participantes suponen casi una quinta parte de los 11.562 asistentes que ha tenido el programa educativo, desde su primera edición en 1999, en la que se contabilizaron 25 grupos. El programa es totalmente gratuito para centros escolares y asociaciones de adultos, y ofrece la posibilidad de visitar las depuradoras, recorrer el proceso de tratamiento del agua residual, conocer su impacto en el río, disponer de material educativo impreso y preguntar a los monitores que, en todo momento, son los responsables de explicar y aclarar cualquier duda que surja entre los visitantes. Hasta el curso pasado, los menores de diez años podían visitar las instalaciones, pero por protocolo de seguridad, NILSA optó por ofrecerles una alternativa a la visita dentro de las aulas: un taller explicativo con elementos sencillos, cotidianos, como coladores y espumaderas, que acercan la tecnología a los más pequeños sin complicaciones. Tudela, la más visitada La depuradora de Tudela, una de las nueve mayores de Navarra, es también la más visitada, en empate con la de Estella. Durante el curso pasado, Tudela acogió la visita de 22 grupos (con 15 personas por grupo), al igual que Estella. Les siguieron en número de visitantes Tafalla-Olite (14 grupos), Bajo Arga (8 grupos), Bajo Ega (6 grupos), Cintruénigo (6 grupos), Baztan (5 grupos), Alsasua-Urdiain (4 grupos), Cortes (4 grupos), Larraga (3 grupos), Uharte-Arakil, Roncal, Olazti y Azagra (2 grupos cada una) y Murillo el Fruto (1 grupo). Tudela también lideró las visitas en torno al río, con 32 grupos que pudieron disfrutar de actividades centradas en la observación de la fauna y la flora del río, la identificación de sonidos de la zona, y el análisis del agua del río en el momento. Inscripciones La campaña de educación ambiental es bilingüe (castellano y euskera), transcurre paralela al curso escolar y durante el verano se tramitan solicitudes y se actualiza el material didáctico. Todos los colectivos interesados en inscribirse de cara a septiembre pueden solicitarlo por teléfono al equipo de Arbuniés y Lekunberri (948 210 131). Al término de la visita, se ofrece la posibilidad de cumplimentar una encuesta de satisfacción sobre la actividad. La valoración del año pasado fue de 4,42 sobre 5 por parte de los alumnos, y de 4,81 sobre 5 por parte del profesorado. Las cifras - Visitas a depuradoras: 103 grupos (85 en castellano y 18 en euskera), procedentes de 27 centros educativos y otros colectivos. En total, 1.368 visitantes. - Actividades en torno al río: 60 grupos (53 en castellano y 7 en euskera), procedentes de 15 centros educativos. En total, 824 visitantes. - Talleres de depuración en el aula: 31 grupos (25 en castellano y 6 en euskera), procedentes de 7 centros educativos. En total, 543 participantes. - Charlas sobre el correcto uso del agua: 29 grupos (25 en castellano y 4 en euskera), procedentes de 12 centros educativos y otros colectivos. En total, 410 participantes. El propio personal de NILSA (36 trabajadores) recibió una de estas charlas para lograr un modo de vida y de trabajo más sostenible.

Casi 31 millones de euros en un año. Es el presupuesto que la empresa pública NILSA gestiona en 2008 para cumplir con los compromisos del Plan Director de Saneamiento de los Ríos en Navarra. De este total, 7,9 millones de euros están dedicados a la construcción de depuradoras, y otros 12 millones se destinan a la operación y mantenimiento de las ya existentes. En este contexto, NILSA cuenta con una decena de proyectos constructivos enmarcados en el Plan Navarra 2012, como la depuradora de Valdega, que entrará en servicio en otoño, o el proyecto de la nueva depuradora del valle de Lónguida, que se pondrá en marcha el próximo año. En este mismo ejercicio, la empresa ha previsto recaudar 24,77 millones de euros a través del canon de saneamiento, que todos los contribuyentes pagan a través del recibo del agua, y cuyo objetivo es financiar completamente el citado plan a partir de la próxima década. En ejercicios anteriores, NILSA también contó con fondos FEDER procedentes de la Unión Europea que supusieron la mitad de la inversión de algunas depuradoras, como ha sido el caso de la recién inaugurada planta en Mendavia. Así lo ha expuesto la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva, a la comisión parlamentaria en la presentación de la memoria de actividades de esta empresa pública, la única adscrita a su departamento. Durante su intervención, Salanueva también ha subrayado el crecimiento de NILSA en el ámbito de los residuos a través del Consorcio de Residuos, que este año cuenta con su primer presupuesto: 10 millones de euros dedicados a conseguir un sistema único, homogéneo y equitativo en el transporte y tratamiento de la basura en Navarra. El esfuerzo por aglutinar voluntades locales para poner en marcha un mismo proyecto para la gestión de residuos en toda la Comunidad ha constituido uno de los principales caballos de batalla de NILSA de finales de 2007 y del primer semestre de este año para la empresa. Por otra parte, la memoria también recoge el compromiso social que NILSA va adquiriendo poco a poco a través de su incipiente estrategia de Responsabilidad Social Corporativa. Como entidad responsable de la depuración de agua residual y como miembro del Consorcio de Residuos, NILSA tiene una inequívoca labor medioambiental para todos los ciudadanos. Más de 85 instalaciones de depuración ubicadas en todo el territorio foral, que tratan correctamente el agua residual del 97% de los ciudadanos, así lo atestiguan. A esto hay que sumar la inminente licitación este verano de las tres plantas de transferencia que compactarán la basura procedente de diferentes mancomunidades para reducir su volumen y transportarla luego a los puntos de tratamiento –con el consiguiente ahorro económico y energético que esto supone–. A pesar de la búsqueda de máxima eficiencia en la gestión, NILSA ha querido dar en 2008 un paso más en su estrategia como empresa y por ello ha impulsado una comunicación más transparente y ágil con la sociedad, ha ampliado su programa de educación y sensibilización ambiental para estudiantes, ha abogado por políticas internas que fomenten la paridad y la igualdad efectiva, y se preocupa por promover acciones para facilitar a sus 36 trabajadores la conciliación de la vida laboral y familiar. Todas estas cuestiones están recogidas en la memoria de actividades, que hoy ha distribuido Salanueva a la Comisión Parlamentaria ante la que ha comparecido y que NILSA envía anualmente a mancomunidades, entidades locales, industrias con aceptación de vertido, instituciones públicas y otras entidades. Cualquier ciudadano que esté interesado en hacerse con un ejemplar puede solicitarlo directamente en la sede de la entidad (Avda. Barañain 22, Pamplona) o consultar su contenido íntegro en la página principal de esta web.

Está financiada en un 50% por fondos europeos. Mendavia tiene ya sus aguas residuales perfectamente tratadas. Así lo ha atestiguado esta mañana la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva, durante la inauguración de la planta depuradora, en la que ha estado acompañada por el alcalde de la localidad, Miguel Ángel de Carlos, el presidente de la Mancomunidad de Montejurra, Fidel Muguerza, el director general del departamento, Pedro Pegenaute, y otros profesionales y políticos. La instalación, que da servicio no sólo a los más de 3.700 habitantes de la localidad sino también a numerosas industrias, ha sido construida por NILSA y financiada por el Plan Director de Saneamiento de los Ríos, si bien, su operación y mantenimiento corresponde a la Mancomunidad de Montejurra, tal y como sucede en el resto de instalaciones existentes en su ámbito de actuación: Estella, Lerín, Allo-Dicastillo, Sesma y Arróniz, entre otras. Hasta la construcción de la depuradora, la localidad vertía sus aguas residuales al río Ebro a través de la regata llamada “La Carcava”. El proyecto, que fue presentado a finales de 2005, supone dar una solución al tratamiento de las aguas residuales que van a parar a uno de los ríos más contaminados de España, el Ebro, y constituye también un ejemplo del desarrollo sostenible que el Gobierno de Navarra impulsa a través de la potenciación del medio rural. La depuradora, que ocupa una superficie de 10.600m² y está ubicada en el término denominado “El Vergel”, es una estación convencional en la que el caudal pasa por las fases de pretratamiento, decantación primaria, depuración biológica, decantación intermedia, segunda etapa de depuración biológica y finalmente por la decantación final. Además, cuenta con un tanque de almacenamiento de fangos, que son el producto resultante tras la depuración del agua. El caudal medio previsto es de 25,83 litros por segundo y el máximo, de 170 litros por segundo. La obra ha supuesto una inversión de 2.761.099,70 millones de euros y está financiada en un 50% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y en el otro 50%, por fondos procedentes del canon de saneamiento, que pagan todos los navarros y que gestiona NILSA. Los costes medios de operación y mantenimiento de una instalación de estas características rondan los 150.000 euros anuales, lo que supone un coste medio de 0,21 euros por metro cúbico tratado, que son financiados por NILSA con cargo al canon de saneamiento, que actualmente está establecido en 0,39 euros por metro cúbico para usos domésticos, y 0,49 euros por metro cúbico para usos industriales y no domésticos. El canon de saneamiento es un impuesto que en 2007 financió el 62,3% de los costes de la depuración en Navarra. El resto de la financiación provino de los presupuestos de Navarra, principalmente, y de fondos europeos FEDER.

La empresa pública NILSA, responsable de la depuración del agua residual en Navarra, ha firmado con la Fundación Aspace Para el Empleo un acuerdo por el que se compromete a fomentar la integración laboral de las personas con discapacidades. Este compromiso implica que NILSA tendrá en cuenta en todos sus procesos de selección a los candidatos que Aspace considere que se puedan ajustar al perfil requerido. También contará con servicios que Aspace ofrece en los ámbitos de la jardinería, la limpieza de instalaciones... para futuros concursos de servicios que pueda licitar. El objetivo de este acuerdo es fomentar una estrategia de responsabilidad social desde el ámbito de la empresa pública también a través de las contrataciones. Los procesos de selección de personal en NILSA se llevan a cabo a través de una consultora de recursos humanos, siguiendo un procedimiento transparente que en su día fue comunicado a la Cámara de Comptos. El programa que la Fundación Aspace Para el Empleo ofrece a NILSA, y al resto de empresas que deseen suscribir este acuerdo de colaboración, incluye el acompañamiento por parte de un orientador con formación especializada de la persona discapacitada –la mayoría con parálisis cerebral– en su entorno de trabajo, hasta que ésta sea completamente autónoma en el desempeño de sus funciones. El objetivo final es que la integración de la persona con algún tipo de discapacidad sea completa, y sus rendimientos y obligaciones en el puesto, equiparables al resto de los profesionales. La Fundación Aspace Para el Empleo lleva cinco años en funcionamiento y hace unos días premió a las empresas colaboradoras que ya habían integrado en su funcionamiento habitual a personas con alguna discapacidad. En esta jornada, en la que la Fundación dio a conocer su labor, NILSA decidió firmar el acuerdo de colaboración como un paso más dentro de su incipiente estrategia de Responsabilidad Social Corporativa, basada en la igualdad de oportunidades, tanto entre géneros, como entre personas con diferentes condicionantes (discapacidades, inmigrantes…). El discreto, pero sostenido crecimiento de la plantilla de NILSA –adscrita al Departamento de Administración Local– en los últimos cuatro años ha supuesto un aumento de las contrataciones. En 2005, la plantilla de NILSA ascendía a 29 personas; en 2006, a 33; en 2007, a 34; y en 2008, a 36. La media de edad de los profesionales está en los 37 años, la composición es casi paritaria en género (56% de hombres y 44% de mujeres), y la rotación es mínima, ya que las contrataciones son permanentes. Este aumento de plantilla está impulsado por la nueva línea de actuación que supone la gestión de los residuos sólidos urbanos –en la que NILSA participa con su gestión a través del Consorcio de Residuos– y ha empujado a sus responsables a fomentar nuevas estrategias de personal, en línea con las buenas prácticas de Responsabilidad Social Corporativa. La empresa espera que el acuerdo suscrito con la Fundación Aspace para el empleo se materialice en una contratación en los próximos dos años.

El Consejo de Administración de NILSA, integrado paritariamente por siete representantes de las entidades locales y siete del Gobierno de Navarra, ha aprobado esta mañana la gestión de esta empresa pública, adscrita al Departamento de Administración Local, durante el pasado año. En 2007 la recaudación del canon de saneamiento, que pagamos todos los navarros a través del recibo del agua y que ha financiado un 51,6% del Plan Director de Saneamiento de los Ríos en Navarra desde que éste se creara en 1989, ascendió a 21,98 millones de euros. Esto supone un 62,3% del presupuesto que NILSA gestionó durante el ejercicio pasado: 35,29 millones de euros. El resto de la financiación provino de los presupuestos de Navarra, principalmente, y de fondos europeos FEDER. El canon de saneamiento facturado está dedicado íntegramente a construir las infraestructuras básicas de depuración (depuradoras, colectores, tanques de tormenta, pozos de bombeo, fosas sépticas…) y también a mantenerlas. Depurar un metro cúbico de agua cuesta 17 céntimos de euro y Navarra depura al año unos 80,44 hectómetros cúbicos, es decir, cuatro veces la capacidad del embalse de Eugi. Por otra parte, NILSA cerró 2007 con 15,14 millones de euros dedicados a la ejecución de obras y otros 10,54 millones de euros destinados a la gestión de las depuradoras. De las obras realizadas, la mayoría correspondió a un régimen de cooperación entre la empresa pública y la entidad local (12,2 millones), un acuerdo por el que la entidad local delega en NILSA tanto el proyecto como la ejecución de la infraestructura. Ésta es la forma más habitual de trabajo frente a las obras de gestión directa de las entidades locales, en las que son éstas las responsables de sacar adelante todo el proyecto, que únicamente es validado y financiado por NILSA. En 2007, este tipo de obras supuso una inversión de 2,9 millones de euros. La mayoría de las depuradoras son operadas por NILSA, si bien las mancomunidades de la Comarca de Pamplona y de Montejurra se responsabilizan del funcionamiento de las plantas que están en su ámbito de actuación. No obstante, el coste de estas instalaciones también está financiado por el Plan Director de Saneamiento de los Ríos, cuya implantación corresponde a NILSA. Durante el pasado año, la empresa pública también asumió la gestión de residuos orgánicos en Navarra a través del Consorcio de Residuos. Todas las mancomunidades de Navarra, excepto la de la Comarca, se han adherido a él para lograr tratar la basura según la normativa europea. Hasta la fecha, la basura se enterraba sin tratamiento en diferentes vertederos. La mayoría han sido ya clausurados y los que todavía operan, como Góngora, cuentan con autorización medioambiental integrada. No obstante, el objetivo del Consorcio es plantear una alternativa a los vertederos similar a la planta de biometanización de Tudela, El Culebrete, en la que el residuo orgánico reciba un tratamiento avanzado. El Culebrete es ahora el destino de la mayoría de los residuos orgánicos gestionados por el Consorcio. La Consejera de Administración Local y presidenta de NILSA, Amelia Salanueva Murguialday, ya ha hecho en este sentido varias declaraciones para lograr que todos los ciudadanos puedan disfrutar de un servicio de tratamiento de basura único, homogéneo y equitativo, con las mismas prestaciones y las mismas cargas económicas. Los usuarios de las mancomunidades adheridas al Consorcio de Residuos pagan desde el 1 de enero de este año 17,5 euros más en el recibo, con los que se financia un 17% del presupuesto del Consorcio de Residuos, que en 2008 ha supuesto diez millones de euros. El 83% restante corre a cargo del Gobierno de Navarra, a través de las aportaciones que ha hecho el Departamento de Administración Local.

La Mancomunidad de Valdizarbe comenzará a llevar residuos a la planta de biometanización de “El Culebrete” el próximo lunes, 25 de febrero, como parte de la estrategia de gestión única de la basura de Navarra impulsada por el Consorcio de Residuos. Esta entidad, a la que ya se han adherido nueve mancomunidades y tres más lo harán en 2009, tiene como objetivo la creación de un sistema homogéneo para la recogida y tratamiento, que además suponga el mismo coste para todos los ciudadanos. En la actualidad, Navarra sólo cuenta con una planta de tratamiento de los residuos conforme a normativa europea: El Culebrete, gestionada por la Mancomunidad de Residuos Sólidos de la Ribera. Por este motivo, la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva, y el director general del departamento, Pedro Pegenaute, han querido conocer de primera mano la instalación. En su visita, han estado acompañados por el gerente de la mancomunidad ribera, Fermín Corella, por su presidente, José María Navarro, y por el gerente de NILSA, Andrés Sola, ya que ésta es la empresa pública que lidera el Consorcio de Residuos. Fermín Corella ha explicado que, en estos momentos, la instalación trata la basura procedente de su propia mancomunidad y de la de Sangüesa. A partir del lunes llegarán los de la mancomunidad de Valdizarbe y antes de que finalice este semestre, comenzará a recibir los residuos de Ribera Alta y Mairaga, lo que supondrá que trate 5.000 toneladas mensuales, frente a las 3.000 actuales. Cuando el próximo lunes se incorpore Valdizarbe, la cifra llegará ya a las 3.500 toneladas para colmar a finales de año la capacidad de la planta, ideada para 60.000 toneladas anuales. La instalación está creada para obtener biogás a partir de los residuos orgánicos a través de un reactor. El biogás genera, a su vez, energía eléctrica y evita emisiones de metano a la atmósfera, el segundo gas que más contribuye al llamado “efecto invernadero”, después del dióxido de carbono. La inversión necesaria para llevar a cabo la planta de biometanización, inaugurada en diciembre de 2006, fue de 9.616.193€, a los que el Fondo de Cohesión Europea aportó 3.662.082€; el Gobierno de Navarra, 4.992.492€ y la Mancomunidad de Residuos Sólidos de la Ribera, 961.619€. Nuevas instalaciones El Consorcio de Residuos ha previsto en su planificación estratégica la construcción de tres estaciones de transferencia. Son puntos en los que se recogerá la basura procedente de diferentes orígenes de Navarra y se reducirá su volumen, para minimizar costes, antes de enviarla al centro de tratamiento. Las ubicaciones de estas instalaciones fueron consensuadas por el Consorcio el pasado septiembre, y se fijaron en los términos municipales de Tafalla, Sangüesa y Baztan. Aún sin estación de transferencia, Sangüesa fue la primera mancomunidad consorciada en llevar sus residuos a “El Culebrete”, tras la clausura del vertedero de La Celada el pasado octubre. En noviembre, la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva, firmó un convenio por el que el Gobierno de Navarra subvencionaba al 100% el coste del transporte y parte del tratamiento de la basura de esta mancomunidad, con 285.000 euros. Cuando la entidad disponga de una de las estaciones de transferencia proyectadas por el Consorcio no tendrá que llegar hasta el destino con sus residuos, por lo que disminuirán los gastos de transporte. Lo mismo sucederá con el resto de las mancomunidades. El Consorcio prevé que las estaciones de transferencia estén operativas a finales de este año.

El Consorcio de Residuos de Navarra ha reunido hoy en el Departamento de Administración Local a todos los presidentes de las mancomunidades que lo integran para presentar a las tres próximas incorporaciones: Sakana, Alto Araxes y Bidausi. Las incorporaciones no se harán efectivas inmediatamente, sino que demuestran la voluntad de las entidades locales y llevarán un tiempo de tramitación administrativa. Con estos tres futuros nuevos miembros, la entidad –que preside la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva–, agrupa a doce consorciados, que incluyen los nueve anteriores: las mancomunidades de Valdizarbe, Mairaga, Eska-Salazar, Malerreka, Bortziriak, Sangüesa, Ribera, Ribera Alta y el Ayuntamiento de Baztan. En esta ocasión, el Consorcio ha convocado a los representantes políticos, que se reúnen de forma más ocasional que los comités técnico y económico, con motivo de la presentación de los tres nuevos socios que casi completan el mapa foral de mancomunidades adheridas. Este hecho adquiere especial relevancia en una coyuntura en la que la basura de Navarra debe ser tratada de forma única y homogénea para que todos los ciudadanos paguen lo mismo por un mismo servicio. En este sentido, el Departamento de Administración Local estableció el pasado diciembre una comisión de coordinación con la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, que gestiona aproximadamente la mitad de los residuos de Navarra, con el objetivo de buscar una solución eficaz y coherente con la que barajan el resto de las mancomunidades de la Comunidad, consorciadas en su práctica totalidad. El comité de presidentes de mancomunidades que se ha reunido hoy ha sido el mismo que el pasado 4 de diciembre aprobó en Tafalla los presupuestos del Consorcio para 2008 y la tasa por el tratamiento de los residuos. La aplicación de la nueva tasa, en vigor desde el 1 de enero, supondrá recaudar 1,7 millones de euros, a los que el Gobierno de Navarra sumará otros 2,6 millones, para tratar correctamente la basura y agilizar el cierre de los vertederos. Además, el Gobierno foral invertirá otros 5,4 millones de euros en la construcción de las tres plantas de transferencia en las que se compactará la basura para llevarla luego al centro de tratamiento. La compactación supone reducir volumen y, por tanto, gastar menos en transporte. La previsión del Consorcio es que las plantas, que estarán ubicadas en los términos municipales de Baztan, Tafalla y Sangüesa, comiencen a construirse esta primavera y estén operativas antes de que finalice el año. El presupuesto del Consorcio para 2008 asciende, por tanto, a 9,73 millones de euros, de los que el 83% será financiado íntegramente por el departamento de Administración Local, mientras que el 17% restante se sumará a la contribución domiciliaria habitual. La necesidad de clausurar los vertederos para cumplir con la normativa europea y para conseguir un entorno más limpio y sostenible ha impulsado a las entidades locales a sumarse a la iniciativa del Gobierno de Navarra de crear un Consorcio de Residuos. Campaña informativa 125.000 folletos fresa en castellano y euskera para explicar al ciudadano cómo y cuándo se va a tratar la basura que genera. Esta es la primera campaña informativa que ha puesto en marcha el Consorcio de Residuos a través de las mancomunidades consorciadas, que son las responsables de enviar el díptico explicativo a todos sus usuarios. Con el logotipo del Consorcio y en el color fresa que caracteriza la imagen de marca, el díptico explica el aumento de la tasa en la recogida de la basura en 1,45 euros al mes por la necesidad de tratarla según la normativa europea. El Consorcio ha puesto en marcha esta campaña porque considera prioritario que el ciudadano esté bien informado de por qué se modifican las tasas y los servicios que recibe. También tiene por objetivo sensibilizar y concienciar de la necesidad de reducir el volumen de residuo que generamos para no degradar el medio ambiente. La estrategia de gestión del Consorcio en todos los ámbitos está basada en la llamada filosofía fresa: dinámica, fácilmente identificable, limpia, positiva, fresca y amable. La voluntad de que los ciudadanos participen en ella y sean conscientes de las posibilidades que ofrece han llevado al Consorcio a informar puntualmente a la opinión pública de sus actuaciones. Aproximadamente la mitad de la población navarra recibirá en su domicilio esta información.

Inaugurada por la Consejera de Administración Local, Amelia Salanueva. Valtierra y Arguedas disfrutan de la remodelación y ampliación de su depuradora. Desde el pasado octubre, la planta ha estado en fase de pruebas con el agua residual y en la actualidad funciona a pleno rendimiento. La remodelación de esta planta se enmarca dentro de la estrategia de NILSA para la próxima década, basada en la depuración de núcleos pequeños y en la reforma de las instalaciones decanas para aumentar su capacidad de tratamiento del agua residual y su operatividad. Tras las obras, que se demoraron por las inundaciones de abril que afectaron a gran parte de la Ribera navarra, la depuradora cuenta con nuevos elementos que refuerzan la línea de aguas. Se trata de un filtro plástico de lecho bacteriano que permite una mayor depuración, dos decantadores, un tanque de retención que actúa como tanque de tormentas y dos instalaciones de tratamiento avanzado de fangos. Además se mantienen las tres lagunas mayores, construidas en 1992, aunque se han suprimido las tres más pequeñas, que de una superficie total de 60.000 metros cuadrados suponían unos 4.500 metros cuadrados. Las lagunas que permanecen, que habían sido hasta ahora el sistema de tratamiento del agua residual, se convierten en una segunda fase del tratamiento, lo que supone reforzar la depuración y conseguir una mayor capacidad de tratamiento en la planta. Por otra parte, los dos tanques de tratamiento de fangos, denominados ATAD por sus siglas en inglés (Autothermal Thermophilic Aerobic Digestión/Digestión Aerobia Termófila Sostenida) implican que los lodos saldrán de la depuradora una vez estén totalmente higienizados y su volumen reducido hasta casi la mitad. Por su parte, el tanque de retención evita episodios de aliviados e inundaciones, como en algún momento ha sucedido en Valtierra, ya que esta localidad cuenta con redes de saneamiento unitarias (aglutinan el agua residual y pluvial), que en determinadas ocasiones, como las tormentas, no pueden admitir todo el caudal. Así, en momentos de fuertes lluvias, el caudal ha provocado desbordamientos en el emisario a su paso por Arguedas y en otros puntos de la red de saneamiento. Este tanque evita este tipo de incidentes. El presupuesto de la obra asciende a 3.179.577 euros y ha sido totalmente financiada por el canon de saneamiento, que gestiona NILSA y que pagan todos los navarros. Las lagunas construidas en 1992 fueron sufragadas en un 90% por el Departamento de Administración Local, con cargo al Fondo de Haciendas Locales, y en un 10% por el canon.