NILSA, Navarra de Infraestructuras Locales, S.A.

Notas de prensa

2022

12 de enero de 2022

Los El Plan del Ciclo Integral del Agua ha invertido en dos años casi 61 millones de euros en un centenar de municipiosArbeiza y Zubielqui estrenarán en marzo su depuradora

El Gobierno de Navarra ha dado cuenta hoy en comisión parlamentaria del Plan Director del Ciclo Integral de Agua de Uso Urbano 2019-2030, que fue elaborado en la anterior legislatura tras cuatro años de trabajo, se aprobó por el Parlamento de Navarra en mayo de 2019 y posteriormente fue encargado a la sociedad pública NILSA como ente instrumental –empresa adscrita al departamento de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra– para su desarrollo.

Durante su elaboración, tuvieron un peso fundamental las entidades locales, con las que se trabajó de manera conjunta y colaborativa, al igual que está sucediendo en su reciente despliegue. Por otra parte, una de las líneas de financiación para las actuaciones contempladas en el plan son los Planes de Infraestructuras Locales (PIL) del Gobierno de Navarra, que en el período 2017-2021 superaron los 26,5 millones de euros.

Inversiones

En cuanto a las acciones llevadas a cabo, cabe destacar las de abastecimiento en alta (desde la captación hasta la potabilizadora), que sumaron más de 13 millones de euros desde 2019, con actuaciones en la cuenca del Bidasoa y el Irati, en el valle de Ultzama, en la Comarca de Pamplona o Tierra Estella. La parte correspondiente al saneamiento en alta (desde el alcantarillado hasta las depuradoras), las inversiones fueron de 20 millones de euros, con actuaciones en todas las comarcas de Navarra. El total de inversión entre 2019 y 2020 ha sido de 60,8 millones de euros, diversificados en seis líneas de actuación

Otras líneas, como las campañas de sensibilización y divulgación han supuesto más de dos millones de euros, mientras que el refuerzo del ciclo integral ha ejecutado una inversión por valor de casi 680.000 euros y las acciones generales de saneamiento han superado los 448.000 euros.

Mientras que las inversiones previstas en el saneamiento en alta se han ido desarrollando, es probable que los plazos recogidos en el documento original para las inversiones en abastecimiento y saneamiento en baja deban ser ampliados para no incurrir en retrasos, ya que las actuaciones para mejorar infraestructuras, tanto de abastecimiento como de saneamiento, están en el entorno de ejecución del 25% respecto a los objetivos establecidos para 2024.

Cambio climático

Este plan es el mayor instrumento contra el cambio climático en materia hídrica de la Comunidad Foral. Estructurado en dos sexenios (de 2019 a 2024 y de 2025 a 2030) y dotado con un total de 464 millones de euros, se trata de la primera vez que se acomete en Navarra la gestión unificada del ciclo integral del agua: desde su captación antes de ser consumida, hasta su devolución al río, una vez depurada. Cabe recordar también que comprende desde las infraestructuras hasta la futura gobernanza (incluyendo tarificación), con un total de 10 líneas de acción.

En junio del año pasado se crearon cuatro grupos de trabajo para supervisar su implantación y la ejecución de las principales líneas. Se trata de los grupos de economía y fiscalidad; proyectos estratégicos; sistemas de drenaje urbano; y cambio climático y contaminantes emergentes. Todos están supervisados por una Comisión de Seguimiento, cuyas funciones consisten en recibir toda la información, analizar el cumplimiento del plan, aprobar la memoria anual y proponer modificaciones o adaptaciones técnicas al plan original. Además, existe un Comité de Coordinación, creado el pasado febrero, que aglutina también a las entidades locales con competencias de abastecimiento de más de 10.000 habitantes. Si bien el saneamiento en Navarra está totalmente encomendado a NILSA, desde la primera ley de saneamiento foral en 1988, el abastecimiento sigue radicando en las entidades locales, por lo que es imprescindible la colaboración permanente.

Conclusiones

Las conclusiones de trabajo para el año pasado arrojaron datos positivos en cuanto a agua no registrada, aquella que se pierde en fugas o captaciones desconocidas y que ha descendido una media del 0,8% del período 2011-2015 al período 2016-2020, aunque presenta gran disparidad según territorios; o el incumplimiento en aguas de consumo por exceso de turbidez, metales, nitratos u otros parámetros, que también desciende del 9,13% al 7,48% en los mismos períodos. 

No obstante, también han puesto de relieve problemas como el coste real del servicio de abastecimiento, que presenta grandes diferencias por territorios, lo que hace muy necesario trabajar hacia su convergencia. Para ello se ha propuesto avanzar con la elaboración de una guía de cálculo de coste del servicio que facilite a las entidades locales su labor, así como con un estudio de un sistema tarifario solidario, equilibrado y que fomente el ahorro y la eficiencia en el uso y la gestión del agua como recurso.

A continuación se ofrece una tabla resumen de las inversiones desglosadas.